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miércoles, 13 de agosto de 2008

Olímpicas controversias

Estos de Beijing también serán recordados -además de la proeza del nadador Phelps de ser el atleta más medallero (de oro, se entiende) de todos los tiempos- como los juegos de las olímpicas controversias sobre lo políticamente correcto. Muchos se han incomodado por las imágenes digitales de los fuegos artificiales que se vieron -y engañaron hasta al más meticuloso- en la transmisión en vivo . Otros, muchos más, por el playback de la tierna niña que cantó en la inauguración, reemplazando a la niña de la voz original que, al parecer, no era tan linda para los organizadores. En estos mismos instantes algunos de los jugadores españoles del equipo olímpico de baloncesto todavía se preguntan qué de malo tiene que todo el equipo se jale los ojos parodiando a un ciudadano chino para una foto publicitaria. El aviso salió en el diario deportivo Marca de España, pero llamó la atención de The Guardian y de ahí rebotó en el New York Times y, por consiguiente, al mundo entero. Pero Pau Gasol, jugador de Los Angeles Lakers y la cabeza pública más visible del equipo español, entendió por fin que la foto fue una mala idea. Las disculpas ya se hicieron, pero en España no habido mayor reacción salvo el apoyo. No es inexplicable: España es candidata a medalla en la disciplina.

Esta buena nota de Yahoo Sports también llama la atención sobre otras controversias racistas en el deporte español. Por ejemplo, Luis Aragonés diciéndole "negro" a Thierry Henry durante un entrenamiento en el 2004. Al igual que el equipo español de baloncesto y los hinchas, Aragonés tampoco entendió por qué la gente se incomodó tanto. También en el 2004, en un partido de exhibición en Madrid, varios jugadores negros del equipo de Inglaterra escucharon ruidosos sonidos de mono lanzados desde las graderías cada vez que tocaban la pelota. Este año seguidores del corredor de Formula 1 Fernando Alonso se pintaron la cara de negro mientras llevaban polos que decían "la familia de Hamilton" en referencia al rival de Alonso, Lewis Hamilton.

¿Qué clase de racismo es el racismo del racista que no comprende que es racista? Yo sospecho que este tipo de racismo no tiene idea de que el racismo existe porque nunca lo ha sufrido o que solo cree que existe en los libros de historia y en los relatos de barcos trasatlánticos cargando esclavos. Creo también que este racismo lleva implícita la idea de que solo el racismo físico es racista, es decir, aquel que se traduce en acciones como una patada, un puñete, un escupitajo, un detención arbitraria, una golpiza o un asesinato. En cambio, los chistes, las bromas o las parodias, según esta forma de ver las cosas, no serían racistas, aunque busquen la burla, la sorna, el chongo fácil o la disminución pública del otro solo porque es de una raza o un físico particular. Y, normalmente, cuando alguien señala estas expresiones racistas considerándolas como tales, algunos reaccionan diciendo que es por un excesivo celo de lo políticamente correcto. ¿Es así? ¿Por qué es importante señalar el racismo aparezca en la forma que aparezca?

Básicamente porque estamos hechos de ideas y las ideas se propagan y contagian con una facilidad increíble. Es probable que tú seas incapaz de golpear a alguien por su raza, pero si eres un deportista de élite y haces algo que puede ser interpretado como racista, te aseguro que habrá alguien -tu fan, que como fan apenas si reprime su irracionalidad-que lo tomará de la peor manera, o sea, de la manera celebratoria, carnavalesca, y que reproducirá e imitará tu gesto inocente hasta convertirlo en un arma peligrosa. Celebrar la inocentada racista -y no censurarla- es echar una pajita más a la fogata de la xenofobia. 

Revisando los blogs de Peru21 me topé con un post de Carlos Carlín y otra muestra del racismo chispoteado, del racismo "no fue mi intención". Su post le pide a los usuarios que colaboren con su memoria para buscar la frase más divertida de las celebridades. El propio Carlín empieza con esta deliciosa frase de Edith Tapia: "no escribiré como Hamlet, pero estoy aprendiendo..." (aunque el comediante aclara que no sabe si es literal). Pero una de las comentaristas le recuerda esta frase de su compañera Johanna San Miguel en su blog en Terra (al que no puedo entrar no sé por qué):

Carlin los comentarios racistas de tu amiga la pituca alicaida de la san miguel cuando rajaba de Monica Cabrejos �??¡Ay, Cabreja, cómo debes estar jalándote las greñas y la bemba! ....


La respuesta de Carlín:

la frase me parece agresiva alicia. viene de estas broncas faranduleras que ya nos tienen hartos a todos, y no es por defender a johanna pero te aseguro que aunque pueda parecerlo no es racista. en el mismo sentido podriamos hablar de agresion cuando se refieren a ella como gordita. creo que ambas deberian relajarse. ya se lo dije a la chata y lo mismo le digo a monica. hay publico para ambas!.


El caso también llamó la atención de Maritza Espinoza en La República. Lo de la San Miguel fue algo peor: 

"¡Ay, Cabreja (se refiere, obviamente, a su competidora de horario), cómo debes de estar jalándote las greñas y la bemba! ¡Ya quisieras, enorme macaquín, parecerte un poco a mi Leysi!"


Pero imagino que para la comedia las disculpas no son siempre necesarias, ni siquiera admisibles. La San Miguel respondió que ella escribe en su blog lo que se le da la gana (nota de Ajá). Como los del equipo español, la San Miguel tampoco entiende por qué tanto chongo.

En estos casos de humor y chacota racista es difícil no recordar lo que le sucedió a Michael Richards -Cosmo Kramer en Seinfeld- cuando en una chispoteada de muy agresivo racismo, lo pensó bien luego y se disculpó. Pero lo mejor fue que lo hizo teniendo a su compañero Jerry Seinfeld escuchándolo. Sucedió en el programa de David Letterman hace un par de años:



El comediante pidiéndole a un comediante amigo que se explique bien y que se disculpe. No pues, eso es demasiado por aquí, de ciencia-ficción.


Además: Una nota del New York Times: "Spanish Insensitivity Should Be Punished" y el caso del iraní que, se sospecha, no quiso nadar en la misma piscina con un israelí.

Otrosí: los editores de la web del NYT a veces piensan las cosas dos veces. Ayer me di cuenta de cómo cambiaron un titular en una nota sobre los récords mundiales rotos en natación (el primer titular era algo franco con la sospecha, el segundo algo más equilibrado y más creativo). Y, ahora, en la nota de los españoles transformaron el titular a una pregunta "Should Spanish Insensitivity Be Punished?", eliminando el tono enfático de la versión original, la que se ve arriba. En realidad, es un buen cambio: la nota no pedía un castigo y tampoco tenía un corte editorial.

Más sobre el tema: el COI se pronuncia sobre la foto que, ahora me entero, también tuvo una contraparte femenina. 

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