Buscar este blog

viernes, 8 de agosto de 2008

El vaso medio lleno de China


Así como en las discusiones sobre el racismo peruano algunos ven la persistencia de antiguos patrones coloniales de comportamiento, mientras que otros son optimistas respecto de sus cambios y quizás su gradual retroceso, la situación de los derechos individuales y humanos en China, a propósito de las Olimpiadas, también han merecido mucha discusión. ¿China merecía ser sede de los juegos a pesar de ser como es? ¿Es el sistema vertical de siempre o se pueden detectar centímetros positivos de desplazamiento? En esta nota del New York Times se discute el tema y se concluye que lo de China es para verlo, a pesar de sus fallas, como un vaso -o un bidón, por lo gigante- medio lleno.

Much remains unfree here. The rights of public expression and assembly are sharply limited; minorities, especially in Tibet and Xinjiang Province, are repressed; and the party exercises a nearly complete monopoly on political decision making.

But Chinese people also increasingly live where they want to live. They travel abroad in ever larger numbers. Property rights have found broader support in the courts. Within well-defined limits, people also enjoy the fruits of the technological revolution, from cellphones to the Internet, and can communicate or find information with an ease that has few parallels in authoritarian countries of the past.

“Some people will tell you, look at the walls, and say they are still pretty high, while others will tell you that there is a lot of space between the walls,” said Nicholas Bequelin, a China specialist at Human Rights Watch. “Both things are true.”

Otro rubro a destacar como consecuencia del deporte: la nueva arquitectura de Beijing. También del New York Times linkeo esta excelente infografía multimedia sobre los nuevos y espectaculares edificios de la ciudad. Y, por cierto, observando estos esfuerzos titánicos de planificación y derroche me pregunto con qué exactamente está soñando el presidente García cuando imagina una sede olímpica. Porque anoche fui al centro de Lima en hora punta y me encontré con lo que un Basadre pesimista etiquetaría como "el problema sin posibilidad": el tránsito. También me pregunto cuál sería la construcción capitalina que mejor representa la modernidad y nuestros admirables crecimientos en las cifras macro. ¿Cuál es el gran edificio de Lima? No me digan que es el de Interbank de Hans Hollein. Porque la verdad es que me deprimo mucho cada vez que paseo por las calles y veo cada edificio horroroso que se levanta en este período de construcción feroz: son oportunidades desaprovechadas para hacer de la ciudad un mejor lugar donde vivir o, ya que muchos ponen su corazón en el turismo, de hacer del city tour una experiencia más o menos agradable. ¿Dónde están los arquitectos con buen gusto?

Datos personales

Archivo del blog